Gracias a la gentileza de una pareja santandereana amante del vino, el dr. Carlos Rueda prestigioso anestesiólogo y la dra. Leisa Puentes, reconocida psicóloga, probamos un vino fortificado realmente exquisito, el Malamado Malbec, proveniente de la localidad de Fray Luis Beltrán, departamento de Maipú, provincia de Mendoza, Argentina.
Se ha convertido en el mejor vino tinto dulce fortificado de Suramérica y es elaborado, en cantidades limitadas, por la bodega argentina Familia Zuccardi. Un tinto generoso, dulce, 100% malbec, la uva emblemática de Argentina, que habiendo reposado durante dos años en barricas de roble francés, es un vino seductor, de color rojo rubí, con perfume a ciruelas maduras, cerezas, pasas de uva e higos secos. Amable a la boca, persisten notas finales de especias como pimienta negra, canela y también almendras tostadas. Es un vino dulce, en equilibrio con la acidez y el porcentaje de alcohol, aterciopelado, de amplio bouquet.
El nacimiento del Malamado se dio en 2001, como resultado de la búsqueda incesante de nuevos productos por parte de la firma Zuccardi, dirigida por José Alberto Zuccardi, hijo del fundador.
Es ideal como postre por sí solo, eso sí con una temperatura de servicio recomendada de 15º centígrados, es una maravilla con un trozo de chocolate negro o postres preparados con este ingrediente. Otro maridaje interesante es con queso roquefort o inclusive con un buen puro.
Nosotros lo probamos con unos deliciosos faláfel, bocados del Medio Oriente, acompañados con muhammara, una salsa para untar procedente originalmente de Aleppo, Siria y nos resultó una combinación suave y equilibrada al paladar.
La anécdota que dio origen a su nombre surgió durante un almuerzo de José Alberto Zuccardi con Jorge Schussheim, un publicista, cantor y gastrónomo argentino que en algún momento estuvo unido a Les Luthiers que en una inteligente e inventiva ocurrencia sugirió nombrar al nuevo y mimado proyecto de vino fortificado de la familia, Malamado, un juego dialéctico que significa Malbec-a-la-manera-de-Oporto, hoy día uno de los vino más premiados y comentados de Argentina.
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| Foto Laura Olejua |
El nacimiento del Malamado se dio en 2001, como resultado de la búsqueda incesante de nuevos productos por parte de la firma Zuccardi, dirigida por José Alberto Zuccardi, hijo del fundador.
Es ideal como postre por sí solo, eso sí con una temperatura de servicio recomendada de 15º centígrados, es una maravilla con un trozo de chocolate negro o postres preparados con este ingrediente. Otro maridaje interesante es con queso roquefort o inclusive con un buen puro.
Nosotros lo probamos con unos deliciosos faláfel, bocados del Medio Oriente, acompañados con muhammara, una salsa para untar procedente originalmente de Aleppo, Siria y nos resultó una combinación suave y equilibrada al paladar.
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| Malamado, faláfel y muhammara. Foto Laura Olejua |
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