Desde el Valle Central de Chile, traemos un Luis Felipe Edwards, Sauvignon Blanc, un refrescante vino frutal, fácil de tomar, para disfrutar en días soleados, donde las uvas son cuidadosamente cultivadas para realzar sus características frutales, que le dan a la variedad una distintiva personalidad.
Su color es de un amarillo pajizo con leves tonos verdosos, reflejos dorados y metálicos, suave, brillante con abundante lágrima fina y transparente.
En nariz se presenta fresco y expresivo, de intensidad media destacando notas de frutas tropicales cítricas como la piña, la lima y leves notas herbáceas a heno y florales a jazmín típicos de la variedad.
Tiene una acidez alta, equilibrada y vibrante de cuerpo medio que otorga frescura y persistencia en boca. Un tanto untuoso, ligeramente lácteo pero seco. Retronasal con aromas a flor blanca y manzana verde. Post-gusto delicioso, salino, sabroso y con cuerpo.
Un vino ideal con pescado al vapor o a la plancha acompañados de salsas a base de cítricos y hierbas como perejil, estragón y albahaca; mariscos; quesos frescos, cremosos y grasos, ya que la acidez del vino contrasta con ese toque graso de quesos como el ricotta, el brie, el camenbert o el feta y ensaladas como una de pollo tipo César, griega e incluso una ensalada de frutas. Platos con carnes de ave que lleven tomate, pimientos verdes y espárragos y pastas con salsas de frutos del mar. Además para aperitivos como anchoas o aceitunas.
Para la comida thailandesa, que es una interacción de salado, dulce y agrio a la vez en un mismo plato es aconsejable este vino.
De nuestra gastronomía colombiana viene bien con un ajiaco santafereño, sancocho de gallina, coctel de camarones y cazuela de mariscos, arroz de lisa, sopa de cangrejo entre otros.
Otros platos específicos ideales para maridar son: el pulpo al olivo, tiradito de pescado en aceite de olivo, chicharrón de calamar en salsa tártara, pizza con anchoas, langostinos al ajillo, arroz con calamares en su tinta, causa de cangrejo, bacalao a la Vizcaína y mousse de conchas.
La temperatura de servicio sugerida de este sauvignon blanc, la cual le permite exponerse, destacando sus aromas y sabores ronda entre 7 y 10ºC.
Además el sauvignon blanc también trae varios beneficios para nuestra salud, ya que un estudio de la Universidad de Connecticut (Estados Unidos) afirma que una o dos copas son buenas para el corazón pues lo protege del envejecimiento, manteniendo en buenas condiciones los ventrículos y reduce las secuelas que puede dejar un paro cardíaco. El responsable de este efecto protector es el resveratrol, que también se encuentra en la pulpa de esta uva blanca y por tanto pasa al vino que es eficaz para mantener limpias las arterias.
Otra investigación llevada a cabo en la Universidad de Reading (Gran Bretaña) halló que el ácido fenólico que se encuentra en el vino ejerce una acción positiva sobre las células cerebrales y nos protege de enfermedades neurodegenerativas como la demencia, sobre todo después de los 40 años.
Sin duda, este delicioso sauvignon blanc chileno del idílico Valle de Colchagua ha encontrado en el océano pacífico su mejor aliado para exaltar su faceta más fresca y nos permiten disfrutarlo en todo su esplendor!!!!
Su color es de un amarillo pajizo con leves tonos verdosos, reflejos dorados y metálicos, suave, brillante con abundante lágrima fina y transparente.
En nariz se presenta fresco y expresivo, de intensidad media destacando notas de frutas tropicales cítricas como la piña, la lima y leves notas herbáceas a heno y florales a jazmín típicos de la variedad.
 |
| Luis F. Edwards Sauvignon Blanc - Foto Laura Olejua |
Un vino ideal con pescado al vapor o a la plancha acompañados de salsas a base de cítricos y hierbas como perejil, estragón y albahaca; mariscos; quesos frescos, cremosos y grasos, ya que la acidez del vino contrasta con ese toque graso de quesos como el ricotta, el brie, el camenbert o el feta y ensaladas como una de pollo tipo César, griega e incluso una ensalada de frutas. Platos con carnes de ave que lleven tomate, pimientos verdes y espárragos y pastas con salsas de frutos del mar. Además para aperitivos como anchoas o aceitunas.
Para la comida thailandesa, que es una interacción de salado, dulce y agrio a la vez en un mismo plato es aconsejable este vino.
De nuestra gastronomía colombiana viene bien con un ajiaco santafereño, sancocho de gallina, coctel de camarones y cazuela de mariscos, arroz de lisa, sopa de cangrejo entre otros.
Otros platos específicos ideales para maridar son: el pulpo al olivo, tiradito de pescado en aceite de olivo, chicharrón de calamar en salsa tártara, pizza con anchoas, langostinos al ajillo, arroz con calamares en su tinta, causa de cangrejo, bacalao a la Vizcaína y mousse de conchas.
La temperatura de servicio sugerida de este sauvignon blanc, la cual le permite exponerse, destacando sus aromas y sabores ronda entre 7 y 10ºC.
Además el sauvignon blanc también trae varios beneficios para nuestra salud, ya que un estudio de la Universidad de Connecticut (Estados Unidos) afirma que una o dos copas son buenas para el corazón pues lo protege del envejecimiento, manteniendo en buenas condiciones los ventrículos y reduce las secuelas que puede dejar un paro cardíaco. El responsable de este efecto protector es el resveratrol, que también se encuentra en la pulpa de esta uva blanca y por tanto pasa al vino que es eficaz para mantener limpias las arterias.
Otra investigación llevada a cabo en la Universidad de Reading (Gran Bretaña) halló que el ácido fenólico que se encuentra en el vino ejerce una acción positiva sobre las células cerebrales y nos protege de enfermedades neurodegenerativas como la demencia, sobre todo después de los 40 años.
Sin duda, este delicioso sauvignon blanc chileno del idílico Valle de Colchagua ha encontrado en el océano pacífico su mejor aliado para exaltar su faceta más fresca y nos permiten disfrutarlo en todo su esplendor!!!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario